Actualidad
Noticia de prensa
Volver a actualidad | Ver todas las noticias | Ver todas las actividades
Álora se prepara para localizar las fosas en las que yacen doscientos fusilados
Álora (Málaga) - 01/06/2014
Publicada: 01/06/2014
La Asociación contra el Silencio y el Olvido ha logrado ya el permiso de la Junta de Andalucía para iniciar los trabajos, dirigidos por el arqueólogo Andrés Fernández La investigación previa indica que hay tres grandes zanjas en el cementerio
El municipio de Álora, en el corazón del Valle del Guadalhorce, está a pocos días de reencontrarse con su memoria histórica y digerir lo que pasó a partir de febrero del 37, cuando una columna italiana rompió el frente de Peñarrubia y Ardales y conquistó el pueblo. Fueron días sangrientos, las delaciones propiciaron ejecuciones sumarísimas sin juicio, en algunos casos, sin que hasta ahora, 77 años después, muchas familias hayan conocido con certeza dónde estaban sus padres, hijos o hermanos ni comprendido por qué no pudieron darle una sepultura digna.
La Asociación contra el Silencio y el Olvido para la Recuperación de la Memoria Histórica de Málaga ha logrado ya el permiso de la Junta, y la subvención, para iniciar los trabajos de localización y delimitación de las fosas del cementerio, en las que yacen en torno a 200 republicanos fusilados. La subvención es de 10.000 y ya ha sido publicada en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), por lo que ya es oficial. Además, la Consejería de Educación y Cultura y Deporte ya ha dado el permiso para el inicio de los trabajos, dado que el cementerio de Álora está dentro de un castillo árabe, y, al ser un Bien de Interés Cultural (BIC), se necesitaba de una licencia especial.
El inicio de las tareas de localización y delimitación de las fosas es inminente, aunque no hay una fecha cerrada. La investigación previa de la asociación, consistente en recolectar testimonios orales de testigos o vecinos y familiares y en la exploración minuciosa de archivos militares y civiles, ha determinado que en el interior del castillo podría haber tres fosas grandes, como mínimo, que acogerían a entre 190 y 200 fusilados adscritos a las distintas ideologías republicanas.
En este caso, la investigadora Raquel Zubasti ha sido la encargada de llevar a cabo el rastreo de las escasas pistas documentales existentes. Ahora, siguiendo esos testimonios orales, el equipo, que estará formado por entre cinco y diez personas y dirigidas por el arqueólogo Andrés Fernández, con una gran experiencia en este campo, marcará la zona de las tres fosas y con catas arqueológicas llegarán al techo de la zanja. Una vez que se corrobora que es fosa común, se marca el perímetro, es decir, la longitud y la anchura, y se deja todo acotado. En este caso, al tratarse de un camposanto, como ocurrió por ejemplo en Villanueva de Cauche, no se usará georradar.
Los testimonios orales, según pudo saber La Opinión de Málaga, son muy sólidos y aluden a tres fosas concretas. Luego no se podrá seguir trabajando durante un tiempo debido al protocolo a seguir: la Junta deberá interponer una denuncia y el juez habrá de pronunciarse y decidir si permite la exhumación de los doscientos cadáveres. Una vez exhumados, se les tratará de identificar por medio de las pruebas de ADN, por las piezas dentales o por los objetos personales que pudieran portar en el momento de la ejecución –un reloj, peines, zapatos o botones–. En muchas de esas fosas, parece que el tiempo se ha detenido. El Ayuntamiento deberá custodiar los restos y serán las familias, junto a la Administración Local, las que decidirán cómo se les da sepultura y de qué forma serán recordados: si con una placa o una estatua, entre otras posibilidades.
La sangrienta toma de la zona, después de que la columna –en la que había italianos, junto al Ejército de Franco– que más tarde conquistó Málaga rompiera el frente de Peñarrubia y Ardales, tuvo su corolario en el frío invierno del 37, cuando los piquetes de ejecución fusilaron a 200 vecinos del pueblo, muchos de ellos sin juicio sumarísimo y otros enjuiciados por rebelión militar y otros cargos inventados ad hoc para la ocasión. Aún quedan flecos de esta información por recoger, y esos datos están en el Archivo Militar de Ávila, que guarda la siniestra memoria de lo acaecido en la época. Los fusilamientos fueron masivos en muchas zonas republicanas que cayeron bajo dominio fascista. Las víctimas en muchos casos ni siquiera profesaban una ideología republicana o de cualquiera de las formaciones izquierdistas de la época, sino que las delaciones por rencillas o denuncias sin fundamento desembocaban en un fusilamiento inmediato. En la pedanía antequerana de Villanueva de Cauche, por ejemplo, uno de los fusilados fue un joven al que se acusó de vestir con el manto antiguo de una Virgen. Eso fue suficiente para acabar con su vida. En pocas semanas, doscientas familias perotas podrán lograr que sus familiares decansen en paz y reciban el merecido homenaje por su martirio.